Isabel Crespín: transformando la energía en empoderamiento femenino
Abril 25, 2025
La historia de Isabel Crespín va más allá de su carrera profesional; es un relato inspirador sobre cómo la determinación, impulsada por la educación, puede encender la chispa del empoderamiento personal y económico en las mujeres.
El 2018 marcó el camino de Isabel, ya que en ese año fue su graduación como Técnica Electricista, un logro que floreció gracias a la oportunidad que AES El Salvador, a través de su programa AES Mujer, en colaboración con el Instituto para el Desarrollo de la Mujer (ISDEMU) puso a su alcance.

La experiencia adquirida en este curso despertó en Isabel un deseo profundo por expandir sus horizontes. Así, se embarcó en continuar con su formación en este rubro y convertirse en técnica en ingeniería eléctrica. Sus inicios, como era de esperarse, no fueron sencillos. Navegar en un ambiente laboral con una marcada mayoría de hombres exigió de Isabel una fortaleza admirable, una convicción inquebrantable en sus capacidades y un profesionalismo que pronto se hizo notar.
Ocho años han transcurrido desde aquellos primeros desafíos, y hoy Isabel se desempeña con destreza como técnica en electricidad en la empresa Aircon. En su día a día pone a prueba todos sus conocimientos, ya que realiza tareas que abarcan desde el mantenimiento preventivo y correctivo de sistemas de aire acondicionado hasta la ejecución de complejas instalaciones eléctricas. En cada tarea, Isabel aplica su pericia técnica, mientras continúa reforzando la confianza de haber realizado un trabajo de calidad.

Pero quizás el aspecto más significativo de la trayectoria de Isabel radica en el impacto que su trabajo ha tenido en su vida. Su dedicación y esfuerzo se han traducido en desarrollo económico, permitiéndole construir una base sólida para su futuro y el de su entorno. Su historia se convierte, así, en un poderoso mensaje de esperanza y un ejemplo tangible de cómo la capacitación y el acceso a oportunidades en áreas técnicas pueden ser catalizadores de progreso individual y social.
Isabel Crespín no solo trabaja con electricidad; ella irradia una energía que inspira. Su camino, desde los cursos iniciales hasta su consolidación como técnica en Aircon, es una muestra contundente de que las barreras de género en el ámbito laboral pueden ser superadas si se cuenta con las oportunidades para capacitarse, acompañadas, a su vez, de tenacidad y autoconfianza.
La historia de Isabel es un faro que ilumina el camino para muchas otras mujeres salvadoreñas que aspiran dejar su huella en el mundo de la electricidad o en cualquier otro rubro que, aún hoy en día, continúe siendo dominado por hombres.